Realmente, es un momento clave para la transición energética porque se están buscando nuevas formas de consumir, de generar energía y, en definitiva, un nuevo sistema energético y socioeconómico. Por eso, desde el ámbito internacional se ha marcado una hoja de ruta con una serie de objetivos a largo plazo que te explicamos a continuación.
Ahorro y eficiencia energética
El ahorro y la eficiencia energética se necesitan mutuamente, y va más allá de elegir la compañía eléctrica adecuada, contratar la tarifa que mejor te conviene y reducir en la factura de la luz. Consiste en obtener los mismos resultados energéticos con menos recursos, reduciendo así el uso de recursos naturales.
Es de aplicación a diferentes sectores, desde el energético a la industria, e implica adoptar tecnología y prácticas que minimicen el uso de energía en la producción, distribución y consumo. Sin embargo, nosotros también podemos colaborar en esta labor con gestos sencillos, puesto que los temas de ahorro energético también afectan a los hogares. Es más, todos deberíamos llevarlos a cabo tanto por nuestro bolsillo como para reducir la huella de carbono. Así, estos son algunos consejos sobre eficiencia energética:
- Apagar dispositivos y luces mientras no los uses.
- Pasar a iluminación led.
- Comprar electrodomésticos con etiquetas.
- Lavar en frío, tiempos cortos y llevando el tambor de la lavadora.
- Optar por el transporte público y el teletrabajo cuando sea posible.
- Revisar periódicamente instalaciones eléctricas y de gas.
- Aísla correctamente tu vivienda.
- Regula la temperatura.
- Monitoriza y controla tu consumo mediante sistemas inteligentes.
Recuerda, la conservación energética implica cambiar comportamientos y enseñar la importancia de ser responsable y participar de manera activa.
Reducir los combustibles fósiles. Los combustibles del futuro
El petróleo escasea, los niveles de contaminación son muy altos y el compromiso con el medio ambiente está muy vivo, por lo que es imprescindible que se busquen alternativas a los combustibles fósiles. Se ha especulado sobre cuáles serán los combustibles del futuro y podemos decir que el punto de mira está en el metanol y, sobre todo, en el hidrógeno. Es más, la Unión Europea se ha marcado como objetivo que en el 2050, al menos el 12% de la energía proceda del hidrógeno verde. Desde Tarífalo hemos reunido las siguientes ventajas del hidrógeno:
- Es renovable y almacenable.
- No emite gases de efecto invernadero.
- Se produce a partir de distintas fuentes, como la energía solar, y es uno de los elementos más abundantes de todo el planeta.
- En ciertos sectores es complicado eliminar las emisiones de CO2 , pero el nitrógeno permite descarbonizar la industria pesada y el transporte.
- Usos muy variados: desde el procesamiento de alimentos, a la fabricación de productos farmacéuticos y el refinado en petroquímicas.
Aunque se presenta como el candidato ideal, todavía no se ha perfeccionado porque cuenta con unos inconvenientes: su volatilidad y que exige una costosa manipulación e inversión para adaptarlo. A pesar de todo, es la alternativa que se seguirá explorando.
La importancia de las energías renovables
Dependemos en gran medida de combustibles fósiles como el petróleo, el gas natural y el carbón, pero estos propician el cambio climático, generan contaminación y no son infinitos. Por este motivo, es fundamental diversificar las fuentes de energía e incorporar energías renovables, entre ellas, la energía solar, eólica, hidroeléctrica y biomasa.
Las energías solar y eólica son las opciones más prometedoras, puesto que cada vez son más eficientes y rentables. Mientras que la energía solar se aprovecha a través de paneles solares que capturan la radiación del sol y la convierten en electricidad, la energía eólica nace de la fuerza del viento capturada mediante aerogeneradores.
Y esto enlaza con un aspecto crítico y es que se necesitan infraestructuras y métodos de almacenamiento de energía. A medida que se incorporan fuentes de energía intermitentes, como la solar o la eólica, necesitamos sistemas eficientes que nos permitan guardar los excesos y poder utilizarlos cuando realmente son necesarios. Afortunadamente, se ha avanzado rápidamente gracias a baterías, acumuladores y medios de transporte preparados para la manipulación y transporte fluido.
Vehículos eléctricos, una revolución imparable
Dentro de la movilidad, lo más eficiente que podemos encontrar en el mercado son los coches eléctricos. Sus ventajas son un gran atractivo para los consumidores, ya que el mantenimiento de los vehículos es mínimo, además de que sufren menos averías mecánicas. A esto también hay que sumarle un bajo coste de carga, el confort durante la conducción y los interesantes beneficios fiscales.
Sin embargo, a pesar de que los coches eléctricos están en crecimiento en España, el porcentaje todavía está lejos de las cifras de otros países. De hecho, la intervención política es casi obligatoria y existen leyes vigentes para que los coches de gasolina y diésel sean sustituidos para el año 2050.
No obstante, el cambio del sector transporte no será completo hasta que no se abandonen por completo la gasolina y el diésel, por eso se está experimentando con motores que funcionan con combustibles alternativos como gases licuados, gas natural o bioetanol.
Apoyar proyectos de I+D+I
Apoyar los proyectos de I+D+I es esencial para impulsar la transición energética hacia un futuro sostenible. Fomentan el uso de nuevos materiales y procesos, superan los desafíos técnicos actuales, mejoran la viabilidad y competitividad económica, generan oportunidades de empleo y crecimiento económico, optimizan la gestión de la demanda energética y mitigan el cambio climático.
Si respaldamos la investigación, el desarrollo y la innovación aceleramos el avance hacia un sistema energético más limpio, seguro y resiliente.
Por supuesto, las políticas y marcos regulatorios desempeñan un papel crucial en este asunto. Los gobiernos avivan la adopción de energías renovables, incluyen incentivos fiscales y financieros, así como normativas que promueven la eficiencia energética en edificios, negocios y la industria. Asimismo, deben incorporar mecanismos de seguimiento y control para garantizar el cumplimiento de dichas leyes. Y como desafío global que es, se requiere la cooperación internacional
Para terminar nos gustaría preguntarte… ¿Cuál de estos puntos te parece el más relevante? ¡Y no lo olvides! En nuestro blog encontrarás todas las noticias del sector junto a consejos sobre ahorro y consumo. Estarás siempre informado de las últimas novedades.
