Es una realidad que la calefacción central tiene los días contados. De hecho, podemos decir que estamos en la cuenta atrás, puesto que el día 1 de mayo es la fecha límite para poder instalar contadores o repartidores de costes en tu vivienda.
Si esta noticia te ha pillado de improvisto, no debes preocuparte, porque, a continuación, vamos a responder las preguntas más frecuentes de nuestros usuarios sobre este tema. Además, por si todavía no has hecho el cambio, te damos todas las claves que necesitas saber para que lo hagas correctamente y recuerda, con nuestra herramienta puedes comparar gas y las diferentes ofertas del mercado.
¿Cuándo es obligatorio quitar la calefacción central? Explicación y fechas
En 2020, el Ministerio para la Transición Ecológica aprobó el Real Decreto 736/2020, de 4 de agosto, por el que se regula la instalación de contadores individuales en todos aquellos edificios que cuenten con sistemas de refrigeración y calefacción centralizada.
Esta ley responde a las directrices europeas, que promueven la eficiencia y el consumo responsable de energía, a la vez que sirve para regularizar el consumo de las viviendas y te permite ahorrar en tu factura de gas.
Dicha normativa entró en vigor tras ser publicada el 6 de agosto en el BOE de ese mismo año, y, con ella, se fijó el día 1 de mayo de 2023 como la fecha límite para que las comunidades de propietarios pudieran instalar los contadores o repartidores de costes.
Sin embargo, el tope podría haber sido antes si perteneces a una de las comunidades que pertenecen a la denominada zona climática fría. Por ello, es conveniente que te informes sobre la normativa específica de tu Comunidad Autónoma.
Por último, merece mención que este plazo se amplía hasta el 30 de septiembre de 2023 si tu comunidad se va a acoger a la nueva TUR 4 o TUR de Ahorro Vecinal. Tener instaladores o contadores es uno de los requisitos exigidos para poder contratar esta tarifa regulada del gas, junto a estar al corriente de pago y no tener facturas pendientes.
Prohibición de la calefacción central. Excepciones
No obstante, la ley no afecta a todo el territorio español por igual, sino que ciertas viviendas están exentas de cumplir con lo estipulado. Las excepciones ante la prohibición de la calefacción central que destacamos desde Tarífalo son:
- Las viviendas construidas antes de 1998, al no se estar sometidas al Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios (RITE).
- Edificios situados en el Levante, el Guadalquivir, Ceuta, Melilla y las islas.
- Donde el ahorro generado, en un máximo de 4 años, no compensa la inversión económica.
- Cuando no sea viable técnicamente porque la instalación térmica tenga un sistema de climatización por aire, de transmisores de vapor, tengan equipados monotubos, convectores de agua o baterías.
Para todos estos casos, recomendamos utilizar nuestro comparador de tarifas online y descubrir alternativas que te permiten ahorrar y que encajan mejor con tus necesidades. ¡Consulta las ofertas más baratas!
Diferencias entre los repartidores de costes y contadores individuales
Una vez que sabemos que no podemos mantener la calefacción central, nos invade la pregunta de cómo debo sustituirla. Básicamente, puedes elegir entre dos alternativas y la decisión depende de cómo es tu sistema de calefacción.
La primera opción son los repartidores de costes, que consiste en poner dispositivo de medición en cada uno de los radiadores y una unidad central que recoge la lectura de cada uno de ellos. Es más habitual en las casas que cuentan con una calefacción dispuesta por columnas, en la cual, el agua se mueve en vertical porque el radiador está unido al de las plantas inferior y superior.
El segundo caso son los contadores individuales, que sólo se podrá hacer si la calefacción tiene un sistema en anillo, donde los radiadores de la vivienda están unidos entre sí, pero cada vecino tiene una única entrada y salida con la unidad central. Y para medir es suficiente con un aparato en la entrada de la instalación de cada casa.
Gracias a cualquiera de los dos sistemas, se mejora el rendimiento energético y se ayuda a los usuarios, ya que pagará exclusivamente por el consumo real que tenga. Al basarse en su consumo individual, puedes adecuar tu consumo, evitar costes innecesarios y garantizar mayor confort. Igualmente, ayudas a frenar el cambio climático y colaboras con el medio ambiente.
Cambiar la calefacción central: cuánto cuesta
“¿Cuánto me va a costar?” Es seguramente la pregunta que más le importa a la gente, pero si bien es cierto que, en un primer momento puede suponer un coste elevado, es una inversión a largo plazo y la vas a amortizar en poco tiempo.
Ahora bien, es difícil dar una cifra exacta porque intervienen bastantes variables. Para empezar, influyen tanto el inmueble como su estructura y antigüedad, y a esto debes sumarle el sistema de calefacción por el que te decantes al final y el número de radiadores dentro del circuito.
Por supuesto, debes poner los contadores o repartidores de los que hemos estado hablando en este artículo y, en ocasiones, aparte de lo anterior, se deben hacer obras extras, como modificar instalaciones, cambiar bombas o reemplazar circuitos.
Si quisiéramos dar una cantidad más precisa, se estima que el coste de instalación es de 900 € de media, aproximadamente. Cada propietario deberá asumir estos gastos, pero siempre puedes consultar las ayudas y subvenciones que el Gobierno ofrece a aquellas familias en situación económica vulnerable.
Los sistemas de calefacción más baratos
La calefacción supone una tercera parte del consumo total que haces en tu hogar, por lo que es muy importante elegir bien el sistema, ya que este puede marcar la diferencia en tus facturas. Asimismo, a la hora de escoger un tipo de instalación u otra, ten presente que afectan factores como el tamaño de la vivienda, su ubicación, el aislamiento y el uso de energía que haces.
Los radiadores eléctricos son el sistema más barato y eficaz en climas suaves y espacios pequeños, pero ante el elevado coste de la luz, el gas natural se presenta como la opción más económica y versátil del mercado. Y, a pesar de suponer una inversión inicial muy elevada, a largo plazo las calefacciones que funcionan con energías renovables son las más económicas, ya sean de aerotermia o biomasa.
Hemos llegado al final del artículo, pero si te ha parecido interesante y necesitas saber más sobre las tarifas de gas y consejos útiles, visita nuestro blog, cuyo contenido actualizamos mensualmente. ¡No te pierdas las últimas novedades del sector!
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