En los últimos años, la conciencia sobre la eficiencia energética y la reducción de emisiones ha ido en aumento y cada vez está más extendida entre la población. Una de las formas más efectivas de contribuir a este objetivo es gestionar adecuadamente nuestro consumo eléctrico y ahí es donde entra en juego la discriminación horaria en las tarifas eléctricas. A continuación, te explicamos todo lo que necesitas saber sobre estas tarifas y sus características.
¿Qué es la discriminación horaria?
La discriminación horaria es un sistema de tarifas que establece diferentes precios de la electricidad según la franja horaria en la que se consume. En un primer momento, era algo voluntario pero la división por franjas horarias de la luz ha pasado a ser obligatorio.
Básicamente, consiste en dividir el día en varias horas y se establecen diferentes tarifas para cada una de ellas. En general, se distinguen tres periodos horarios:
- Hora punta. Es el tramo horario en el que la demanda de electricidad es mayor, generalmente durante las horas diurnas, y por eso el precio de la electricidad es más elevado (10:00-14:00 y 18:00-22:00 horas).
- Hora llana: Es el tramo horario intermedio, por lo que el precio de la luz no es ni en el más caro ni el más barato. Cubre desde las 08:00-10:00 horas, desde las 14:00-18:00 y las 22:00 horas.
- Hora valle. Durante este periodo el precio de la electricidad es el más bajo de todos y va de 00:00-08:00 horas. Fines de semana y festivos tienen las 24 horas en valle.
Además, con este cambio de tarifas, la potencia también tiene dos periodos con precios distintos para cada una. Estos períodos son:
- Punta, de 00:00-08:00 horas, fines de semana y festivos.
- Valle, de 10:00-14:00 y 18:00-22:00 horas.
¡Conoce las tarifas con discriminación del mercado con nuestro comparador de tarifas online!
¿Qué es la discriminación horaria clásica?
Todavía hay algunas comercializadoras que ofrecen tarifas con discriminación horaria clásica, aunque solo se da dentro del mercado libre. Consiste en dividir el consumo de la luz en dos franjas horarias, que varían dependiendo de la estación del año:
- Horas punta. Son las horas más caras y se concentran entre las 13:00-23:00 horas en verano y las 12:00-22:00 en invierno.
- Horas valle. Son las que van de las 23:00-13:00 horas en verano y las 22:00-12:00 horas en invierno.
Con esta modalidad, los usuarios cuentan con 12 horas valle todos los días de la semana.
¿Cómo contratar una tarifa con discriminación horaria?
Si quieres contratar tarifas con discriminación horaria, los consumidores interesados deben tenern un contador de luz en su vivienda, ya que miden el consumo hora a hora y esto permite a la comercializadora facturar para cada franja horaria. En el caso de que tuvieras que instalarlo, deberás abonar 9,04€ + IVA por los derechos de enganche.
El proceso para contratar es sencillo porque solo tienes que ponerte en contacto con la compañía de tu elección y tendrás que facilitar una serie de documentos: datos del titular del suministro, cuenta bancaria, dirección exacta del punto de suministro, código CUPS y potencia contratada.
¿Cómo sé si tengo una tarifa con discriminación horaria?
Si estás en el mercado regulado o PVPC (Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor) tendrás una tarifa con discriminación horaria sí o sí. Por el contrario, si estás dentro del mercado libre tendrás que confirmar si cuentas con este sistema de tarifas.
¿Cómo puedes saber si tienes una tarifa con discriminación horaria? Tienes que comprobar tu factura de la luz, concretamente el apartado donde aparecen los datos sobre el contrato, tus datos personales y el tipo de tarifa. También puedes acceder al área de clientes de tu compañía, que seguramente esté disponible tanto en su página web como en su propia aplicación móvil.
Cómo ahorrar con las tarifas de discriminación horaria
La discriminación horaria puede resultar muy ventajosa para aquellos usuarios que sean capaces de adaptar su consumo eléctrico a los periodos de tarifas más económicas. Aquí te dejamos algunos consejos para aprovechar al máximo este sistema:
Identifica patrones de consumo
Analiza tus hábitos de consumo eléctrico para identificar en qué momento del día utilizas más energía. Esto te permitirá planificar y ajustar tu consumo a los periodos más económicos.
Desplaza el consumo de energía
Tras identificar tus patrones de consumo, intenta desplazar actividades que requieran un alto consumo de electricidad, como lavadoras y lavavajillas, a periodos de tarifas más económicos.
Controla el consumo en tiempo real
Instala un contador inteligente o utiliza aplicaciones móviles que te permitan monitorizar tu consumo en tiempo real. Esto te ayudará a estar al tanto de tu consumo eléctrico y a ajustarlo según las tarifas horarias.
Revisa y optimiza tus contratos y potencia contratada
Analiza regularmente la factura de electricidad para asegurarte de que tienes contratada la potencia adecuada para tus necesidades. Un exceso de potencia es un gasto innecesario. Consulta a tu compañía para ajustarla según tus requerimientos y hábitos de consumo reales y, recuerda, siempre tendrás el comparador de Tarífalo a tu disposición para comparar las ofertas de las empresas líderes del sector.
Utiliza electrodomésticos eficientes
Elige electrodomésticos con etiqueta de eficiencia energética A + o superior. Estos aparatos consumen menos energía y te ayudarán a reducir tu factura eléctrica, especialmente si los utilizas durante los periodos de tarifas más económicas.
Programa los electrodomésticos
Muchos electrodomésticos modernos tienen la opción de programar su inicio o retrasar su funcionamiento. Aprovecha esta función para programarlos durante el periodo valle o llano. Por ejemplo, haz que la lavadora empiece a funcionar de noche y así aprovechar la tarifa más económica.
Aprovecha las horas de sol
Si tienes paneles solares o sistemas de energía renovable en casa, procura utilizarlos durante el periodo punta para reducir tu dependencia de la red eléctrica y ahorrar aún más.
Aísla tu hogar
Mejorar el aislamiento de tu hogar puede ser una forma eficiente de ahorrar energía. Asegúrate de que tus ventanas estén bien selladas, utiliza cortinas o persianas para mantener la temperatura adecuada y evita fugas de calor o frío. Esto reducirá tu necesidad de utilizar dispositivos de climatización durante el periodo punta.
Apaga los dispositivos en standby
Muchos dispositivos electrónicos consumen energía incluso cuando están en modo espera, por eso, desconecta completamente los equipos que no estés utilizando para evitar un consumo innecesario, especialmente durante el periodo punta.
Optimiza la iluminación
Elige bombillas LED de bajo consumo en lugar de las tradicionales. Además, aprovecha al máximo la luz natural y utiliza la iluminación artificial solo cuando sea necesario. Durante el periodo valle o llano, puedes aprovechar para realizar actividades que no requieran una gran cantidad de iluminación.
Recuerda que cada hogar tiene unas particularidades y es importante adaptar estos consejos a tu situación y necesidades específicas. Con una combinación de buenos hábitos de consumo, conciencia energética y aprovechamiento de los periodos de tarifas más económicas, sin duda podrás reducir tu factura eléctrica.
¿Quieres conocer otros consejos para ahorrar en tu factura de la luz? Descubre las últimas noticias sobre el sector de la energía en nuestro blog.
